Evaristo en Syldavia
Bueno, en Syldavia exactamente no, sino más bien en la República Checa, pero el idioma es más o menos el mismo.
Eih bennek, eih blavek.
Ya no soy Evaristo. Ya no soy el rey de na.
Bueno, en Syldavia exactamente no, sino más bien en la República Checa, pero el idioma es más o menos el mismo.
Eih bennek, eih blavek.
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3 comentarios
Cabrón.
La envidia más cochina me corroe.
Hombre, teniendo en cuenta que la envidia es la base del capitalismo (normalmente es sólo cuando el vecino se compra un BMW que a uno se le ocurre que quizás puede y debe permitirse un BMW), y que ahora la iglesia es liberal y neocon, es probable que el pecado de la envidia ya no sea tal. De hecho, y si se escucha detenidamente la COPE por 2 o 3 segundos, me parece que tampoco lo son ni la avaricia, ni la soberbia, ni por supuesto la ira. Vamos, que quitando la pereza, que es un pecado un tanto nifunifá, y la lujuria y la gula, que hoy en día con internet y el telepizza han quedado un tanto devaluados, ya no hay pecados como los de antes.
Quedas por tanto absuelto, hermano Godofredo, aunque quizás para estar seguros lo mejor sea que reces 10 avemarías y 15 padresnuestros.
Mucha flipación con tintín y los viajecitos...cabrón...
Cudno me recorra yo media Europa este verano ya llenaré yo mi mierdablog con fotitos de tintín!!