El Aguirregate

«Madrid está gobernada por quienes temen, cada hora que pasa, que alguien hable demasiado»(...)

«¿Cuál será el próximo escándalo, lo sabe usted?», «¿Nos va a decir que pone usted la mano en el fuego por usted misma?», «¿Quién le avala a usted?», «¿Tiene una idea, aunque no sea más que aproximada, de cómo le ven fuera de Madrid?», «¿Cuántos casos de corrupción ha descubierto usted?», «¿Conocía usted las actividades de su vicepresidente, o se ha enterado, como de costumbre, por la prensa?», «¿Sabía usted que estaba utilizando fondos públicos para sus iniciativas particulares? ¿Lo sabía usted, o ha traicionado su confianza?», «¿Es cierto que el vicepresidente dedicaba a sus socios al espionaje de los ciudadanos para fortalecer su propia posición política?», «¿Se siente usted abochornada, señora Aguirre, por las actividades de su vicepresidente?», «¿Por qué se opuso a la investigación sobre los dossieres?»

Imagino que cuando Aznar dijo todo esto hace 15 años no imaginaba que algún día El rey de la baraja utilizaría sus palabras, cambiando España por Madrid y González por Aguirre, para darles un sentido tan tremendamente actual.

La única diferencia: que ahora no dimite ni dios.